Se están analizando problemas que padecen desde hace tiempo los afiliados. De un lado dicen que el atraso por el pago a las prestaciones se achicó en el tiempo, que se realizan actualizaciones; y del otro expresan que ante un contexto inflacionario tan alto las modificaciones que se dan, y con cancelaciones que en promedio tardan 90 días. Hay visiones encontradas y muy rígidas, desde la defensoría intentarán generar condiciones para apelar a un diálogo honesto y salir con soluciones reales expresadas reconociendo que no se trata de un escenario fácil y que dependerá de las voluntad de las partes.