El reconocido periodista y escritor Luis Rosales visitó los estudios de N9 y presentó su libro sobre la vida del papa: “Francisco, el argentino que puede cambiar el mundo”. Se trata de una traducción al español de una biografía en inglés que había escrito junto a su amigo y colega Diego Olivera.
Resaltó que Francisco, más allá de ser el Sumo Pontífice, también “el primer papa de las Américas, el primer latinoamericano, el primero fuera de Europa”. Pero además recordó que es el primer jesuita que llega al Trono de Pedro. Por lo que su objetivo tiene un mandato “que va muchísimo más lejos que la interna política Argentina”, manifestó.
“Si te invitan a recorrer los jardines vaticanos todo lo que rodea a la Basílica de San Pedro esa colina allí en los jardines entendés lo efímero que es un papado en la vida de la iglesia”, expresó Rosales para remarcar que en esos jardines se representa en cada escultura a un papa de los 400 que han pasado por el lugar sagrado. Por lo que “vos competís con un legado histórico gigante cuando te transformas en papa”, resaltó.
“Cuando Bergoglio era joven eligió voluntariamente misionar en Japón, pero se enfermó de un pulmón, no pudo viajar al Japón, por esa enfermedad se quedó en Buenos Aires y terminó siendo el jefe de los Jesuitas de la República Argentina”.
Sobre la visita del papa Francisco en Mongolia, el periodista señaló que “es una buena punta para entender qué está haciendo el papa argentino que tantas expectativas generó”. Y recordó de tal forma el trabajo que están haciendo los jesuitas en la misión de evangelización, que se está realizando en algunos países del mundo, pero también en ciertas provincias de Argentina.
A su vez, explicó que el viaje del papa a Mongolia tiene otro propósito, que es su visita a China. Si bien Rosales explicó que Mongolia está ubicada entre Rusia y China, lo cierto es que Francisco “es el primer papa que consigue firmar un tratado con el gobierno chino, que no es otra cosa que con el partido comunista chino”. En el tratado se trabaja en el común acuerdo en cuanto al método para seleccionar los obispos.
