Tras recuperarse de un accidente de trabajo sufrido en 1999, Ramiro Cardozo, de Resistencia, se consagró campeón mundial de su categoría. Jugaba al rugby, tras accidentarse en Bariloche, su vida le cambió al 100%.
«Cuando te pasa una tragedia tenés dos opciones, seguir o quedarte, y para seguir necesitas herramientas», dijo el chaqueño, afirmando que el deporte le ayudo con la autoconfianza.
