Los canales de comunicación a través de medios digitales cobraron protagonismo indiscutible a partir de la pandemia. En este contexto, se perfeccionan cada vez más rápido las modalidades de estafas y fraudes: perfiles falsos en redes sociales que envían mensajes directos, llamadas telefónicas, mensajes de texto o de WhatsApp y otras aplicaciones de mensajería, además de correos electrónicos engañosos para obtener datos personales y bancarios.
Con lo cual, mediante una entrevista en Noticiero 9 con Julio López, especialista en ciberseguridad y asesor de empresas, hablamos sobre los desafíos actuales y las medidas necesarias para protegernos en el mundo digital.
López señala que la ciberdelincuencia ha experimentado un crecimiento significativo, equiparable e incluso superando a la delincuencia tradicional. Destaca que hoy en día, la mayor vulnerabilidad radica en el error humano, específicamente en la falta de comprensión y precaución al interactuar con herramientas tecnológicas.
«Hoy, todos los sistemas son muy seguros, desde las fintech hasta los bancos, quienes son atacados somos nosotros, las personas. Representamos el punto de inseguridad hoy en día», señaló López.
Asimismo, explicó que vivimos en un período de transición tecnológica, lo que nos expone a riesgos. Comparó esta fase con el momento en que se implementaron los cinturones de seguridad en los automóviles, destacando que, si bien es incómodo al principio, con el tiempo se convierte en una parte esencial de la seguridad.
En cuanto a la seguridad bancaria, enfatizó en la importancia de operar a través de aplicaciones móviles de bancos y fintech. Explicó que los sistemas son seguros, pero la vulnerabilidad reside en las personas. También destacó el cambio hacia la autenticación biométrica mediante teléfonos celulares, un paso importante para fortalecer la seguridad. «Cuando buscamos delincuentes por estafas, muchos ya están en la cárcel y, sin embargo, operan desde allí. ¿Por qué? Porque tienen acceso a teléfonos celulares», precisó también.
Por lo tanto, instó a la población a ser consciente y a adoptar prácticas seguras, como no clickear enlaces de correos sospechosos y denunciar estafas. También abordó el uso de «mulas» en ciberdelitos, subrayando la importancia de denunciar casos para desactivar cuentas bancarias utilizadas por los delincuentes.
Hizo hincapié en la «ingeniería social», donde el error humano es explotado. La transición tecnológica, según él, es un período peligroso: «Somos vulnerables a llamadas, correos electrónicos; nuestro sistema operativo, nuestra cabeza es vulnerable. La transición es lo que nos pone en peligro».
En este punto, expuso estrategias utilizadas por ciberdelincuentes, como el engaño telefónico: «Te dicen que tienen información sobre tu tarjeta bancaria y te manipulan para revelar datos. La indignación o el miedo son herramientas poderosas que utilizan para obtener información personal».
“Estamos alcanzando niveles más seguros, pero esto no sería posible sin la colaboración de entidades como el Registro Nacional de las Personas (Renaper)», subrayó también López. De tal forma subrayó que la validación biométrica a través de dispositivos móviles, como el uso de la cámara para verificar la identidad, representa un avance significativo.
Respecto a las redes sociales y correos electrónicos, Lopez remarcó la necesidad de activar la autenticación de dos factores en servicios como por ejemplo WhatsApp, Instagram y correos electrónicos. Resaltó la inmunización que esto brinda contra posibles hackeos y subrayó que esta práctica se convertirá en una norma en el futuro.
De tal forma, que la transición hacia medidas más seguras es inevitable, y la colaboración entre entidades públicas y privadas es esencial para enfrentar la ciberdelincuencia en constante evolución.
