En una tarde inolvidable, Defensores de Vilelas logró lo impensado: se coronó campeón del Torneo Apertura de la Liga Chaqueña de Fútbol, marcando su primera estrella liguista en 71 años de historia. El “Verde” venció 1-0 como local a San Martín, y con ello, inscribió su nombre en la historia grande del fútbol chaqueño.
El gol de la victoria fue obra de "Rata" Brizuela, sellando así una campaña excepcional dirigida por Alejandro Barbona, quien se mostró emocionado al hablar sobre este logro sin precedentes para el club. “Uno siempre sueña, anhela concretar los objetivos, pero bueno, por ahí la dimensión y la forma que se logró realmente de por sí es un hecho histórico para la institución, porque es la primera estrella en un campeonato liguista y encima con las estadísticas que nos acompañan lo hizo mucho más relevante”, comentó Barbona tras el partido.
Este logro, según Barbona, va más allá de lo deportivo, tocando aspectos fundamentales de la institución. “Hicimos coronario de eso. Y aparte, quiero no dejar pasar por alto también que el comportamiento deportivo del equipo, tanto dentro como fuera de la cancha, fue un ejemplo a seguir. Vivimos en una sociedad con mucha violencia, y el mensaje que transmite este equipo es un ejemplo tanto adentro como afuera”, destacó el entrenador.
El DT también hizo hincapié en la importancia del trabajo colectivo y el compromiso de todos los actores involucrados. “Ganar el torneo de la Liga es sumamente complicado. Esto no es solo mérito de los jugadores, sino también de los dirigentes, el cuerpo técnico, y la hinchada. Todos hicieron su parte para que esto fuera posible”, afirmó Barbona.
El partido contra San Martín, que tenía todos los ingredientes para ser una fiesta, se jugó bajo una intensa carga emocional, con más de 3.000 personas presentes en la cancha. “Fue un partido muy emocional. Las emociones superaban todo lo táctico, físico, y estratégico. Pero por suerte hablamos mucho con el plantel y lo pudimos coronar”, recordó el entrenador, visiblemente satisfecho.
Cuando se le preguntó cuándo sintió que el equipo podía ser campeón, Barbona reveló: “No sé si hay una fecha exacta, pero uno percibe cómo está el grupo, cómo toma los partidos con respeto hacia el rival. Nunca hubo relajación, y eso es lo que nos permitió llegar hasta aquí”.
Con cinco fechas aún por jugarse, Barbona dejó claro que el equipo seguirá con la misma disposición. “Quedan cinco partidos donde hay que respetar a los rivales, al calendario, y a nuestro trabajo. La única forma de respetarnos a nosotros mismos es hacerlo de la mejor manera”, concluyó.