El ministro de Desregulación calificó al esquema de obra pública de los anteriores gobiernos como un "mecanismo de corrupción y sometimiento político".
Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación del Estado, anunció ante empresarios de la Fundación Mediterránea que la obra pública "no vuelve más" en Argentina. El funcionario justificó esta decisión argumentando que era un "mecanismo de corrupción y sometimiento político". Sturzenegger destacó la determinación del presidente Javier Milei para eliminar este sistema y enfatizó la importancia del equilibrio fiscal en la gestión actual.
Por otra parte, el ministro defendió el veto presidencial a la ley jubilatoria, calificando la actitud del Congreso como "infantil" por aprobar gastos sin considerar su financiamiento. Sturzenegger resaltó la magnitud del ajuste fiscal implementado por el gobierno, comparándolo con situaciones históricas de posguerra, y subrayó la coherencia ideológica del gabinete en cuanto a la reducción del gasto público.
Finalmente, en su discurso, Sturzenegger abordó varias medidas de desregulación, incluyendo cambios en el acceso a la información pública, la puesta en disponibilidad de empleados del INCAA y la modificación del cobro de impuestos provinciales y municipales a través de facturas de servicios públicos. El funcionario instó a los empresarios a colaborar en la identificación de regulaciones que obstaculizan la competencia, en lugar de buscar beneficios sectoriales.