La misión Polaris Dawn, liderada por Jared Isaacman, marca un nuevo hito en la exploración comercial del espacio con una caminata a 700 kilómetros de altitud.
La misión Polaris Dawn de SpaceX ha logrado un nuevo hito en la historia de la exploración espacial al llevar a cabo la primera caminata espacial protagonizada por turistas. La tripulación, compuesta por cuatro civiles, se prepara para abrir la escotilla de la cápsula Dragon a una altitud de 700 kilómetros sobre la Tierra, una proeza sin precedentes en el ámbito privado. El comandante de la misión, Jared Isaacman, de 41 años, y la ingeniera de SpaceX Sarah Gillis, serán los encargados de realizar la salida al espacio, convirtiéndose en los primeros astronautas no gubernamentales en realizar una actividad extravehicular.
El proceso previo a la caminata incluyó una serie de preparativos meticulosos. Los cuatro miembros de la tripulación llevaron a cabo un protocolo de respiración previa, pruebas de movilidad de los trajes y controles de presurización en la cápsula. Una vez que la presión en la cabina Dragon se redujo a un nivel de vacío, se abrió la escotilla, exponiendo a la tripulación al vacío del espacio exterior. Mientras Isaacman y Gillis realizaban la caminata, los otros dos miembros de la misión, Scott Poteet y Anna Menon, permanecieron dentro de la cápsula para supervisar el desarrollo de la operación.
La caminata espacial durará aproximadamente dos horas, con Isaacman y Gillis alternándose en la salida durante intervalos de 15 a 20 minutos cada uno. Los trajes espaciales utilizados en esta misión han sido diseñados para mantener a los astronautas conectados a la cápsula mediante cables que les proporcionan oxígeno y un dispositivo de barras que les permite sujetarse mientras se desplazan. “Será algo parecido a bailar”, expresó Isaacman, describiendo la sensación de moverse en el espacio.
La misión Polaris Dawn también tiene como objetivo realizar una serie de experimentos científicos y una prueba de comunicación láser, lo que subraya el carácter experimental y pionero de esta aventura. Sin embargo, expertos como Sean O’Keefe, exdirector de la NASA, han advertido sobre los riesgos involucrados, señalando que el desafío es considerablemente mayor que en cualquier misión comercial anterior.
Con esta misión, SpaceX no solo expande los límites de la exploración comercial del espacio, sino que también prepara el terreno para futuras expediciones que podrían llevar a los humanos más lejos en el cosmos, consolidando su posición como líder en la carrera espacial privada.