El índice de inflación de Agosto mostró un leve repunte respecto al mes anterior. Aunque la inflación se desaceleró enormemente respecto a las mediciones de principios de año, aún resulta dificultoso para el Gobierno romper la barrera del 4%.
La inflación en Argentina durante el mes de agosto alcanzó el 4,2%, una cifra que, si bien se mantiene en la línea de los meses anteriores, sigue siendo motivo de preocupación. Marcelo Lescano, magíster en finanzas y licenciado en economía, brindó a Radio Nordeste su análisis sobre este resultado y sus implicancias para la economía nacional en una entrevista reciente.
Lescano destacó que este índice de inflación puede considerarse "racional" dentro del contexto económico actual del país, marcado por grandes desequilibrios y desafíos monetarios. "Es una inflación muy racional para el contexto monetario que estábamos viviendo en Argentina a principios de año, con esta gran cantidad de pesos que se habían emitido el año pasado y con los problemas cambiarios que tenemos", afirmó.
Sin embargo, el economista también señaló que el aumento en ciertos sectores fue considerablemente mayor. "Vivienda, agua y electricidad subieron un 7%, lo que refleja cómo se van ajustando los precios de los servicios. Además, alimentos y bebidas aumentaron por encima de la media nacional, lo que ha hecho que llenar el changuito en provincias como Corrientes, Chaco, Formosa y Misiones sea más caro que en el mes anterior", explicó.
El cepo cambiario es otro de los factores que, según Lescano, impide que la economía argentina despegue. "Mientras no se saque el cepo, la economía tiene restricciones para despegar. Nadie va a traer inversiones a la Argentina desde el exterior si no puede sacar sus ganancias en dólares. Es obvio que el inversor no va a querer invertir en Argentina", agregó.
A pesar de algunos signos de recuperación en ciertos sectores, como el aumento del crédito y la actividad en la construcción, Lescano advierte que la situación sigue siendo dramática. "Estamos con un paciente crítico que se está recuperando, pero que no está para salir a correr una carrera", comentó, refiriéndose a la delicada situación económica del país.
En términos de proyecciones futuras, el experto no es optimista respecto a una reducción significativa de la inflación en lo que resta del año. "Romper este 4% será más para el año que viene. Si seguimos con este sendero, vamos a cerrar con una inflación en torno al 130% para fin de año, lo cual, si bien es mejor que el 211% interanual del año pasado, sigue siendo una cifra altísima", concluyó.