A más de un año del femicidio de Cecilia Stryzowsky y la causa judicial que sacudió al Chaco y al país, la Escuela de Gestión Social del ex barrio Emerenciano ha renovado su imagen bajo la supervisión del Ministerio de Educación y busca avanzar hacia una nueva etapa.
La Escuela de Gestión Social del Barrio Emerenciano, que anteriormente enfrentó una serie de dificultades y críticas debido a su vinculación con la figura del polémico dirigete social y jefe del clan Sena, ha experimentado una profunda transformación. En 2023, la creación de la Asociación Civil Educadores Unidos permitió que el Ministerio de Educación tomara la gestión del establecimiento, brindándole un nuevo liderazgo y supervisión. La directora Marcela Muladino destacó: “Las actividades continúan normalmente. A fines del ciclo 2023, el Ministerio de Educación nos pasa la administración general de todos los niveles educativos”. Este respaldo gubernamental ha sido clave para asegurar la continuidad del proyecto educativo.
Un cambio significativo ha sido la renovación de la imagen de la escuela. Muladino explicó: “Optamos por pintar las paredes de blanco y celeste, los colores de nuestra bandera, para darle una nueva imagen y tratar de parar con la estigmatización que tenemos”. El objetivo de estos cambios, que incluyeron también la modificación de los uniformes, es distanciarse de la vinculación con el controvertido líder del barrio, Emerenciano Sena, ya que las familias aún asocian la escuela con su figura. A pesar de los desafíos, la matrícula ha aumentado y la comunidad ha mantenido su apoyo constante.
Además, la propuesta educativa ha sido ampliada con nuevas actividades extracurriculares, como taekwondo, arte y acrobacias aéreas. Germán Román, vicedirector de la institución, señaló: “Nuestra propuesta pedagógica es muy rica, tenemos taekwondo, arte, acrobacias aéreas, además de las materias tradicionales”. Este enfoque integral ha contribuido al crecimiento de la matrícula, que actualmente cuenta con 406 estudiantes en primaria, y se espera que aumente en los próximos años.
Por su parte, Silvana Velázquez, directora del jardín de infantes, subrayó el compromiso de la institución con las necesidades alimentarias de los niños, muchos de los cuales provienen de familias en situación vulnerable. “Sabemos que hay chicos que no acceden a una cena, y el desayuno es importante. Satisfacemos estas necesidades lo mejor que podemos”, afirmó Velázquez, destacando la importancia de contar con un nutricionista que ajusta los menús a las necesidades de los pequeños. Actualmente, el jardín cuenta con 245 alumnos en turno mañana y tarde.
El trabajo conjunto entre la escuela, las familias y las autoridades educativas ha permitido que la institución siga adelante y supere los obstáculos del pasado. Como concluyó Muladino: “Nuestro objetivo es que los niños y estudiantes tienen derecho a una educación, y ese es nuestro trabajo, trabajar para ellos y por ellos”.
