La aeronave de Lufthansa, con 348 personas a bordo, enfrentó fuertes movimientos sobre el océano Atlántico, aunque logró aterrizar sin inconvenientes
Un vuelo de Lufthansa que conectaba Buenos Aires con Frankfurt experimentó violentas turbulencias sobre el océano Atlántico este martes, dejando un saldo de 11 personas heridas entre pasajeros y tripulantes. El Boeing 747-8, que transportaba 329 pasajeros y 19 miembros de la tripulación, se vio afectado al atravesar una zona de convergencia intratropical, un fenómeno meteorológico caracterizado por el encuentro de corrientes de aire que generan fuerte inestabilidad.
Las turbulencias, descritas como "breves y violentas", provocaron lesiones leves en los afectados, quienes recibieron atención médica inmediata tras el aterrizaje. A pesar del incidente, la aerolínea alemana aseguró que la seguridad del vuelo LH511 nunca estuvo comprometida.
La compañía confirmó que la aeronave pudo completar su trayecto y aterrizar sin complicaciones en su destino final, enfatizando en un comunicado oficial la importancia de mantener el cinturón de seguridad abrochado durante todo el vuelo. El incidente resalta la relevancia de las medidas de seguridad aérea, especialmente en zonas conocidas por su actividad atmosférica como la convergencia intratropical.