El oficialismo suspendió la reunión de comisión prevista para firmar dictamen, pero mantiene abierta la negociación con gobernadores y la oposición.
El Gobierno anunció la suspensión de la reunión de comisión donde se planeaba avanzar con el dictamen del Presupuesto 2025, reconociendo la falta de consenso con las provincias y bloques opositores. En conferencia de prensa, el diputado libertario José Luis Espert aseguró que “el Poder Ejecutivo continuará trabajando para alcanzar los acuerdos necesarios” y no descartó convocar a sesiones extraordinarias en caso de avances en las negociaciones.
Entre los principales puntos de discordia se encuentra el destino de los recursos del impuesto a los combustibles y la reducción de los Aportes del Tesoro Nacional, lo que genera tensiones con los gobernadores. Además, la flamante Agencia de Recaudación y Control (ARCA), que recibe el 1,9% de lo recaudado, es otro eje de debate, ya que las provincias exigen que los fondos no utilizados vuelvan a la coparticipación.
Las negociaciones también se ven truncadas por las demandas de redacción en la regla fiscal, que fija ajustes en los gastos según los ingresos reales. La oposición busca que cualquier incremento recaudatorio se destine a áreas previamente estipuladas y no quede a discreción del Ejecutivo, mientras que el oficialismo defiende su flexibilidad para mantener el equilibrio fiscal.
En este contexto, el Gobierno enfrenta presiones por resolver el tratamiento del Presupuesto antes de fin de año, ya que una nueva prórroga del actual plan sería vista como un retroceso institucional. Sin embargo, la falta de consenso con los gobernadores mantiene el escenario abierto y tenso, mientras la Casa Rosada insiste en que "el déficit cero no se negocia".