Un video con mensajes violentos alertó a las fuerzas de seguridad: "Esto nunca va a terminar"
Un video protagonizado por presuntos integrantes de bandas narcoterroristas desató una fuerte alarma en el gobierno nacional. En las imágenes, los agresores, armados con fusiles FAL, subfusiles FMK3, pistolas Glock y escopetas calibre 12, lanzaron amenazas directas a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. Además, advirtieron sobre la expansión de sus acciones a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. "Vamos a empezar a dejar muertos acá", declararon.
Bullrich no tardó en responder, señalando que estas amenazas "pueden estar ligadas a bandas muy fuertes de la Provincia de Buenos Aires" y que los grupos delictivos podrían tener conexiones con presos de cárceles federales como Ezeiza y Marcos Paz. "La actitud de ese video y las amenazas son formas narcoterroristas. Pensamos que pueden tener vínculos con estas prisiones de alto riesgo", afirmó en declaraciones al canal Todo Noticias.
El gobierno nacional emitió un comunicado: "No se equivoquen, con nosotros nunca podrán. En la Nueva Argentina no hay espacio para la violencia armada". Además, se convocaron reuniones de emergencia con equipos de inteligencia e investigación para identificar a los responsables. Según Bullrich, ya se están analizando tanto la procedencia del video como la identidad de sus autores.
El Plan de Seguridad 90-10, anunciado previamente por Bullrich, cobrará mayor relevancia tras este incidente. La estrategia, destinada a combatir el 90% de los homicidios que ocurren en el 10% del territorio nacional, se implementará en zonas críticas como el Gran Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. "Vamos a redoblar los esfuerzos contra estas bandas. No cederemos ante estas amenazas", subrayó la ministra.
Por último, el armamento exhibido en el video también genera preocupación. Según expertos, la presencia de fusiles FAL, usados tradicionalmente por fuerzas militares, indica un alarmante aumento en el poder de fuego de las bandas. Las autoridades consideran que estos grupos podrían estar accediendo a armas desviadas de armerías oficiales, además de las municiones sustraídas a la Policía de Santa Fe. El gobierno, por su parte, reafirma su compromiso de enfrentar esta amenaza con toda la fuerza de la ley.