En un emotivo retorno a las Islas Malvinas, ex combatientes argentinos han encontrado un espacio de sanación y reflexión, reviviendo momentos cruciales de su pasado y rindiendo homenaje a sus camaradas caídos en combate.
«El viaje es muy bueno para nosotros, los muchachos fueron 20 conmigo ahora», compartió Ángel «Coqui» Flores, ex combatiente. «Han podido recorrer muchos lugares en la isla, les mostré muchos lugares y principalmente fuimos al cementerio de Darwin a hacer un homenaje a nuestros camaradas muertos y después cada uno recorrió su posición.»
El recorrido incluyó visitas a diversas posiciones estratégicas como Darwin, Canso Verde, Monte Tamredon y William. Flores relató la intensidad del viaje: «Caminamos mucho porque hay que subir los montes, hay que recorrer y el espíritu de ellos, yo creo que se apoderó del chico de 19 años que estuvo en Malvinas, y por eso pudieron aguantar todo, subir los montes, la lluvia, la neblina fuerte, y eso nos hace falta a nosotros y nos cura.»
Con 80 ex combatientes ya beneficiados por estos viajes, Flores resaltó su impacto positivo: «Este es un viaje que nos ayuda mucho. Ya se han salvado 80 excombatientes con estos viajes, así que estamos bien, felices, y cada vez que volvemos de allá, somos otras personax.»
A pesar de las emociones encontradas, Flores subrayó la importancia de seguir luchando por la soberanía de las Islas Malvinas: «En ocasiones es triste, pero el hecho de estar sobrevolando las islas ya empieza el nerviosismo entre nosotros y las ganas de pisar ese suelo tan querido. Hoy tenemos otra arma, los jóvenes pueden estudiar y capacitarse para que no vuelva a pasar una guerra y que luchemos de forma pacífica para que se recuperen las Malvinas.»
Con el tiempo transcurrido desde el conflicto de 1982, el tema de la soberanía sigue vigente. Flores concluyó: «Ya pasaron muchos gobiernos, pasaron 42 años y todavía el tema de la soberanía está ahí.»
