Tesla Inc., el gigante de los vehículos eléctricos propiedad de Elon Musk, se enfrenta a desafíos económicos debido a una disminución global en la demanda de estos vehículos, lo que ha llevado a la empresa a anunciar una reducción del 10% de su fuerza laboral, equivalentes a 14,000 empleados.
Este ajuste fue revelado poco después de la visita del Presidente Javier Milei a la Gigafactoría de Austin, Texas, según un correo filtrado enviado por Musk a sus empleados y reportado por Reuters. Además, la compañía ha decidido suspender el desarrollo de un modelo de auto económico previamente prometido para 2025, un hecho que ha resonado negativamente en los mercados financieros.
La caída en las ventas de vehículos eléctricos, que afecta a varios fabricantes a nivel mundial, ha obligado a empresas como Ford y General Motors en América del Norte, y Mercedes-Benz y BMW en Europa, a posponer sus planes de electrificación completa, optando en su lugar por fortalecer las motorizaciones híbridas.
Este cambio de estrategia responde a un entorno competitivo intensificado, especialmente por la presencia de fabricantes chinos como BYD, que ofrecen precios accesibles y una gama de vehículos híbridos, una opción que Tesla no posee al dedicarse exclusivamente a la producción de vehículos eléctricos.
El modelo de producción de Tesla, conocido por su eficiencia al usar menos partes y un ensamblaje más simplificado, ha sido una ventaja en tiempos de éxito de ventas, pero no suficiente para contrarrestar la actual tendencia negativa en la demanda.
A pesar de tener al Tesla Model Y como el auto eléctrico más vendido en 2023, la compañía no logra alcanzar los volúmenes de gigantes automotrices como Toyota. Esto ha obligado a Tesla a reconsiderar sus estrategias, incluyendo una serie de recortes de precios en un intento por mantener su competitividad, aunque recientemente ha comenzado a revertir esta política incrementando nuevamente los precios.Los desafíos de Tesla también se reflejan internamente, con la reciente salida de altos ejecutivos clave. Además, la cancelación del modelo económico, que se conocía internamente como Model 2, ha afectado la percepción del futuro crecimiento de la empresa. Esta serie de eventos subraya las dificultades que enfrenta la compañía en un mercado global cada vez más saturado y competitivo, en el que debe innovar constantemente mientras maneja las expectativas de crecimiento y rentabilidad en un sector en rápida evolución.
