Diputados convirtió en ley el proyecto que incorpora la violencia digital a la Ley 26.485 sobre Protección Integral a las Mujeres, conocido como Ley Olimpia, y que aborda los delitos que violen la intimidad sexual de las personas a través de medios digitales y la difusión sin consentimiento de cualquier contenido íntimo.
El plenario legislativo aprobó por unanimidad -con 230 votos afirmativos- esta iniciativa que fue aportada por el Frente de Todos, Juntos por el Cambio, el Interbloque Federal, Provincias Unidas y la izquierda, en una sesión maratónica que comenzó este martes al mediodía.
En videollamada con N9, Eliana Grandier, periodista diplomada en Género y Políticas Públicas, explicó los alcances que comprende la presente ley. “A partir de esta normativa lo que vamos a poder hacer es incorporar en nuestra actual ley de violencias la tipificación de violencia de género digital”, señaló, aclarando que hasta el momento esta categoría no estaba. Y en consecuencia la legislación no reconocía lo que sucede dentro de los planos digitales y de las nuevas tecnologías, respecto a la violencia de género.
Sin embargo, “gracias al arduo trabajo y a la votación de la madrugada de hoy ya vamos a contar con entender esta modalidad de violencia dentro de una de las violencias de género”, precisó.
A su vez, explicó que la ley abarca todos aquellos entornos digitales, donde se da el mayor flujo de las violencias de género ya que «va un poco más allá de solamente internet o solamente las redes sociales». Y subrayó que «todo lo que podamos hacer a partir de las tecnologías digitales, con un dispositivo móvil. con una red social, con una red de mensajería, va a estar incluido dentro de estas categorías de las violencias de género digital».
Respecto a cuales las penalidades que comprende este tipo de delito digital, aclaró que aún no está definido ya que se está trabajando complementariamente con la Ley Olimpia y la Ley Belén. De tal manera que al tener un sistema legislativo con dos partes, la civil y la penal, con la Ley Olimpia están trabajando desde lo civil, y con la Ley Belén se abocan a los casos de penalidades. Con lo cual, el caso de las penalidades “es una deuda que aún seguimos teniendo pendiente”, señaló.
Por lo tanto, la periodista sostuvo que a partir de la sanción de la Ley Olimpia el objetivo de los grupos de colectividades y militantes es poder seguir impulsando y poniendo en agenda la parte complementaria que corresponde con la promoción y prevención, que tiene relación directa con la legislación penal.
Además, precisó que la Ley Olimpia permitirá a las colectividades poder realizar campañas de prevención desde las políticas públicas, porque “la idea es poder caminar hacia un cambio de paradigma, hacia entender que las violencias que mujeres y disidencias vivimos en los planos analógicos y físicos, se traslada con mayor impunidad en los planos digitales porque siempre hay una cuestión de anonimato que permite que las personas que llevan adelante estas agresiones sientan otros niveles de impunidad a la hora de realizar estas violencias”, subrayó.
