La fiscal Natalia Lovey Pessano fue blanco de ladrones en su hogar. La Policía detuvo a un joven vinculado a una reconocida dirigente piquetera de la ciudad.
La noche del sábado se vio sacudida por un nuevo episodio de inseguridad en la ciudad de Resistencia. La fiscal Natalia Lovey Pessano, del fuero de narcomenudeo, fue víctima de un robo en su propia vivienda.
Al menos tres individuos ingresaron furtivamente al patio trasero de la casa de la funcionaria judicial, llevándose consigo una serie de objetos que incluían una bicicleta, artículos de limpieza, prendas de vestir, mercadería y bebidas. El ingreso no presentaba signos de violencia, lo que sugiere que los ladrones accedieron de manera discreta al quincho de la vivienda.
Tras la denuncia de la fiscal, la División Delitos contra la Propiedad de la Policía inició una exhaustiva investigación. Con la ayuda de las grabaciones de seguridad del domicilio, se logró identificar a uno de los delincuentes, descrito como un individuo de contextura delgada, vestido con bermuda corta y con una remera cubriendo su cabeza, ingresando por el sector del garaje.
Los esfuerzos de la policía dieron frutos cuando dos jóvenes, de 33 y 25 años, fueron detenidos en cercanías de la calle Obligado y avenida Italia, mientras consumían las bebidas alcohólicas robadas en el domicilio de la fiscal. Durante la detención, se incautaron cinco botellas de las mencionadas bebidas.
Los detenidos, sin embargo, señalaron a otro individuo como el responsable del robo y proporcionaron información sobre su paradero. La policía montó una vigilancia discreta en la dirección indicada, culminando en la detención del sospechoso. El joven detenido, hijo de una conocida dirigente piquetera de la ciudad, fue encontrado en posesión de una remera blanca de mangas largas y un par de zapatillas negras, que coincidían con la descripción proporcionada por la fiscal.
