En una decisión casi unánime, la legislatura provincial de Chaco aprobó ayer la limitación del uso de teléfonos celulares en lugares de alojamiento y cárceles de la provincia. La medida busca abordar la problemática asociada al uso indebido de estos dispositivos por parte de los internos, con el fin de prevenir actividades delictivas dentro y fuera de los centros de detención.
Iván Gyöker
El diputado provincial Iván Gyöker, representante del bloque de Juntos por el Cambio , ofreció destacó, en diálogo con N9, la importancia de esta medida para combatir el crimen organizado y garantizar la seguridad ciudadana: «Nosotros entendemos que hay que terminar con estas herramientas que se le dio para el crimen organizado a los delincuentes, a los presos, que hizo que nosotros muchas veces vivíamos de rehenes de ellos, donde se hacían estafas, donde se hacían operaciones de narcotráfico, donde había crimen organizado, donde se extorsionaba a familiares de otros presos».
La nueva normativa representa un cambio relevante en la regulación del uso de celulares dentro de las instituciones penitenciarias. Según Gyöker, la versión aprobada por el bloque de JxC propone una limitación más taxativa y persigue avanzar hacia una prohibición total de la utilización de estos dispositivos en las cárceles chaqueñas. En contraste, otras versiones presentadas por el Frente Chaqueño proponían una regulación menos restrictiva, manteniendo un uso más amplio de los celulares en estos entornos.
Uno de los aspectos fundamentales de la nueva ley es la implementación de un sistema de comunicación controlado y supervisado por las autoridades penitenciarias. Según Gyöker, los internos podrán comunicarse únicamente en horarios determinados y a través de teléfonos específicos administrados por las unidades carcelarias. Además, se prevé la adquisición de inhibidores de señal para evitar el uso clandestino de celulares dentro de las instalaciones.
La iniciativa ha sido respaldada por diversos sectores políticos y sociales, destacando la necesidad de fortalecer el control y la seguridad en las cárceles de la provincia. «Queremos avanzar hacia teléfonos del propio sistema fijo, del propio sistema carcelario que utilicen los reos o los propios presos para poder comunicarse con su familia, con sus defensores o con quien sea, pero que sea un sistema controlado y no tengan estas herramientas para poder abusar de la ciudadanía y coaccionarnos de nuestra libertad», afirmó Gyöker.
La implementación efectiva de la ley requerirá un proceso progresivo, incluyendo la adquisición de tecnología y la capacitación del personal penitenciario. Sin embargo,y para Gyöker y otros defensores de la medida, este avance representa un paso crucial en la lucha contra el crimen organizado en la protección de los derechos y la seguridad de la ciudadanía chaqueña.
