La sequía no solo está produciendo un fuerte impacto productivo en el grueso de las actividades agropecuarias, sino que también está generando distorsiones de precios en algunos productos, como en la carne vacuna. Según los especialistas, por la falta de pastos en los campos los productores se ven obligados a desprenderse de los animales y aumentan la oferta del mercado interno. Con la llegada de las lluvias, podría comenzar un proceso de retención de la hacienda que suba sus valores.